MENTE

CÓMO CONTROLAR LA ANSIEDAD

La ansiedad es un estado de alerta que se activa cuando hay un cambio en el entorno, basándose normalmente en experiencias pasadas poco agradables.

Vivimos en una época de muchos cambios, por lo que es importante mantener la ansiedad bajo control para no caer en sus manos.

Y es que, cuando convives con la ansiedad es normal que sufras:

• Dolor de cabeza
• Tensión
• Mareo
• Problemas gastroinstestinales
• Fatiga
• Insomnio

¿Te suena de algo?

Si la respuesta es si, sigue leyendo porque estos sencillos 6 pasos te ayudarán a salir de esas situaciones y llevar una vida mucho más feliz.

¡Eso si! Recuerda que…

“Reducir la ansiedad es un estilo de vida”

También podemos acompañarte a eliminar lo que te provoca ansiedad a través de nuestros procesos de coaching online. ¡Agenda tu primera sesión gratuita aquí!

6 PASOS PARA REDUCIR LA ANSIEDAD

1.Reconoce cuándo y cómo surge.

• ¿Qué está pasando?
• ¿Cómo te sientes física y emocionalmente?

Haz un diario de sensaciones dejando plasmadas estas respuestas.

2. Observa tus pensamientos.

Normalmente éstos no se corresponden con la realidad, son pensamientos ansiosos desde una perspectiva de peligro basados en:

• Predecir el futuro
• Leer mentes
• Anticipar catástrofes
• Leer personas.

Obsérvalos sin involucrarte con ellos, simplemente identifica su origen y distínguelos de la realidad.

3. Reta a tus pensamientos negativos.

Piensa que el problema lo tiene un amigo… ¿Qué consejo le darías?

4. Enfrenta tus miedos.

Reconoce la ansiedad y afronta la situación siguiendo adelante aun con miedo.

5. Respira profundo.

Llena tu estómago de aire durante 6 segundos.

Retén el aire 4 segundos.

Suéltalo durante 7 segundos.

Aunque la respiración es algo que hacemos constante e inconscientemente, hay momentos en que debemos ser conscientes y utilizarla en nuestro beneficio. Aquí tienes un vídeo con 5 ejercicios de respiración que te ayudará muchísimo con esto.

Ver vídeo

6. Acepta la incertidumbre y confía en el presente.

Concéntrate en el presente y actúa, sin preocuparte por el futuro.

Cuando dejas la preocupación por el futuro en un segundo plano, el presente se vive mucho más plenamente y feliz. 😉